Es un sueño cumplido porque desde chica veía las colmenas y era un sueño poder realizar esta actividad. No tengo más que agradecimiento para Reinas de corazones porque nos ha brindado la posibilidad de poder lograr, concretar esto que para mí es un sueño.

Las abejas tienen su propia luz, generan su propio lugar y pisan fuerte. El trabajar en conjunto, eso me da la visión de decir que, si nosotras nos unimos, como pasa con Reinas de Corazones, es eso trabajar juntas y ayudarnos mutuamente, eso es lo que más me ha dejado en estos tiempos. 

Se aprende todos los días. Hoy tenemos 800 colmenas que trabajamos los tres, mi marido, mi hijo y yo. El logro mas significativo es personal. Hace un par de años atrás empecé con Reinas de Corazones, que es un grupo de mujeres que trabajamos la colmena. La verdad que es lindo, porque es un aprendizaje y trabajamos en comunidad.